Construída hacia 1738 como parte del acueducto de Santa Fe, se ubicaba en donde doblaba el Acueducto que traía agua desde Chapultepec por la Calzada de la Veronica (hoy en día Circuito interior Melchor Ocampo) hasta la Ciudad de México, es decir, se ubicaba entre las colonias Santa María la Ribera y San Rafael, a la altura del cruce de Circuito Interior y la Calzada México-Tacuba.
Los orígenes de este acueducto se remontan a tiempos del Huei Tlatoani Moctezuma I quien, asistido por el gran Nezahualcóyotl llevó agua dulce al islote donde los mexicanos habitaban luego de haber rendido al Imperio Tepaneca, destruyendo su capital, la antigua Azcapotzalco.
Durante la Guerra de Conquista, una de las cartas que jugó Cortés para acelerar el asedio a la capital mexica fue cortar sus fuentes de suministro de agua. Una táctica que en la practicidad no resultó tan efectiva puesto que el asedio final a Tenochtitlan duró de Mayo a Agosto de 1521.
Este acueducto de Santa Fe o también conocido como de San Cosme comenzaba en las faldas del cerro de Chapultepec y culminaba en una fuente sobriamente decorada ubicada detrás del Convento de Santa Isabel, conocida como "de la Mariscala" esto es en lo que hoy en día es la parte posterior del Palacio de Bellas Artes.
Imagen de la fuente de la Mariscala tal y como aparece en el álbum de acuarelas México Pintoresco de 1855 |
Hacia principios del siglo XIX se comenzaron a remplazar los caños de barro del acueducto por otros de metal fundido subterráneos que aguantaban mayor presión de manera que el acueducto quedó inutilizado y hacia 1866 comenzó su demolición sin embargo sus fuentes aún permanecieron durante algunos años más, incluída la de la Tlaxpana.
Por fortuna la fuente de la Tlaxpana era de una belleza tal que diversos artistas de su época la hicieron el objeto de sus obras y así es que su belleza aún puede ser admirada.
Su temática era completamente barroca, daba la ligera impresión de ser un retablo de dos cuerpos dividido en tres calles por columnas estípites de una belleza que no había visto, sin embargo, en lugar de ser habitado por santos y mártires eran músicos los que ocupaban los nichos, el ático tenía el escudo de la Muy Noble y Muy Leal Ciudad de México custodiado por ángeles músicos, un símbolo hoy en día tan nacional como lo es el escudo del ágila sobre el nopal en algo tan virreinal como lo es la fuente de agua de un acueducto ahora inexistente le quita el peso al tiempo, lo mezcla con nuestra actualidad y le da sentido a la frase "un país sin pasado es un país sin futuro.
Lamentablemente esta fuente no vió el amanecer del siglo XX pues en 1899 fue finalmente demolida.
Dibujo tomado de un cuaderno de 1738 que describe las pagas de los operarios que intervinieron en la fábrica de esta fuente y su arquería. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario